jueves, 9 de junio de 2011

4 Mayo, 2011 Reflexiones Innecesarias

Utilizar a alguien para salir de un agujero que él mismo ha creado. Tapar mis verdades para reflejar sus mentiras. Y saberlo… pero no hacer nada para poder evitarlo. Y amarle cuando la vida te deja, ¿Es acaso esto vida?
Ponerte bonita sólo porque sabes que va a verte dos minutos. Te pones unas mallas de flores porque le has oído hablar de ellas. Te sueltas el pelo porque sabes que le gusta introducirse en él para olerlo… o al menos eso crees tú. Le esperas cada día, a la misma hora y en el mismo lugar de siempre, ¿Y te lo agradece cómo? Desapareciendo una y otra vez.
Pero tú le necesitas... o al menos eso crees.

A veces yo también me pregunto qué hago aquí. Y porqué no me voy y le dejo hundiéndose en el fango en el que está metido y no sabe cómo salir, o no quiere salir.
¿Sabes qué es lo peor? Que nunca, jamás en la vida olvidarás sus besos, ni sus caricias, ni sus abrazos, ni sus miradas, ni su ternura. Que tú creías que te juraba amor eterno mirándote de esa forma tan especial y tan intensa. Y tú, pobre de ti, te dabas cuenta que te utilizaba, que jugaba contigo y con tus sentimientos más puros, pero no has sido capaz nunca de olvidarle… ni siquiera de intentarlo.
Y tú piensas en el tiempo ¿Qué tiempo? No hay tiempo para algo que nunca saldrá bien. Lo sabes, te lo han dicho mil y una veces. Pero también sabes que no puedes vivir sin el sabor de sus besos, sin esas caricias que ocultan un sin fin de mentiras.
Y llegan nuevas ilusiones, pero se van antes de que puedas saborearlas….
Y te estás volviendo loca… pero no te importa. Porque ya no te importa nada, sólo sobrevivir a aquel amor que era imposible y que ahora te está destrozando la vida.

1 comentario:

  1. No olvides que los destrozadores que destrozan corazones acabarán con camas destrozadas.

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